Una de la mañana.
Ipod; musica y a descansar. Tomaremos la última antes de irnos a dormir.
Hoy las musas han vuelto a darme plantón.
Ipod; musica y a descansar. Tomaremos la última antes de irnos a dormir.
Hoy las musas han vuelto a darme plantón.
Suena esa canción.
El random ha elegido rescatarla del olvido.
Los primeros acordes me mantienen aun despierto.
De una patada, la primera estrofa rompe el candado de mi caja de recuerdos.
Huele a Verano.
A mar, crema solar y a pizzas en el horno. Barbacoa, cerveza y tabaco de liar.
Huele a colonia de frambuesa.
Huele a sangria, pero sabe a paellas de Aixerrota.
Huele a que hoy nos comemos el mundo, y mañana tendremos una resaca de campeonato.
Recuerda a calles estrechas que llevan a la playa.
A noches a la luz de la luna en la terraza del apartamento, y canciones de verano a todo volumen en coches de alquiler.
A una tarde de playa en Sope planeando la noche de fiesta.
A Conil y a Split.
A Sanxenxo y a Salou.
A un amanecer reflejado en tus pupilas.
Suena como una canción de Calamaro a las 2 de la mañana por las calles de Vigo.
Como una guitarra y 5 armónicas.
Suena al himno del Athletic lejos de Bilbao.
A un amanecer reflejado en tus pupilas.
Suena como una canción de Calamaro a las 2 de la mañana por las calles de Vigo.
Como una guitarra y 5 armónicas.
Suena al himno del Athletic lejos de Bilbao.
Suena a acento del Sur.
Suena a La Fuga, Marea y Extremoduro.
A Sabina, Chaouen y Quique.
Suena como la primera vez que la oí.